Hola, voy a realizar un comentario sobre el tema de la privatización de la sanidad. Soy concejal socialista en la oposición de un pueblo de valencia y esto ya es demasiado. Añado unos comentarios para que los difundáis por donde podáis:
En mi opinión, en nuestro sistema democrático, la sanidad pública es uno de los principales servicios y pilares del estado de bienestar y tenemos la mejor sanidad que pueda existir hasta el momento, en calidad y en cantidad. La cobertura es enorme. En este momento, estamos en la lista del séptimo país del mundo en cuanto a asistencia sanitaria y parece que el Sr. Camps y compañía tienen otros intereses en este momento.
Nunca creí que llegara a escribir sobre algo como esto, nunca pensé que se hiciera realidad o al menos, pensé que ocurriría en otro momento y circunstancias. La educación y la sanidad deben ser públicas para que todos tengamos los mismos derechos y oportunidades.
Las empresas privadas que operan en este sector, lo hacen, entre otras razones, por obtener beneficios económicos.De los casi 500 euros por persona y año , que por medio de los impuestos se paga a cada UTE las empresas gestionan la asistencia sanitaria teniendo como objetivo primordial los beneficios de los accionistas. Dicen que algunas de las decisiones asistenciales en una gran empresa comercial, están muy lejanas de los enfermos. Y por ello no se distingue con claridad la necesidad de servir al enfermo de la apetencia de rentabilidad. económica.
Un claro ejemplo: Cuando la Conselleria se niega a crear el servicio de oncología del hospital de Villajoyosa y concierta la asistencia oncológica con un Hospital Privado de Benidorm, ¿es consciente que perjudica la imagen del sistema público porque se limita la capacidad de resolver los problemas de sus ciudadanos?Claro que lo sabe, pero es una manera sutil de privatizar....o no tan sutil. Si no se quiere favorecer y legitimar los operadores privados, ¿ por qué la Conselleria no ha creado el servicio en el hospital público de Villajoyosa, mientras que el nuevo hospital de Denia (gestionado por DKW) dispondrá de un servicio completo de oncología?
¿No sería más lógico que en lugar de destinar una parte importante del presupuesto sanitario público en beneficio de empresas privadas, este dinero se destinaran íntegramente a la asistencia sanitaria? Si la respuesta es afirmativa, es evidente que la sanidad pública valenciana debería estar gestionada directamente por la A.V.S.
Pero, según parece los argumentos no le valen al Gobierno Valenciano, que continúa desarrollando su Plan de Privatización (PP) de nuestro Modelo Sanitario Público, socavando sin prisas pero sin pausas los pilares de nuestro sistema de bienestar social.
¡Por una sanidad pública y equitativa para todos los ciudadanos!
Por último, añadir que todavía no hay documentación y que estaremos al tanto cuando la haya para informar a todos los ciudadanos del tema. Aquí termina el primer capítulo de la privatización del centro de salud. No le daremos las gracias al PP, ni mucho menos, al Sr. Camps.
1.- En la pasada legislatura la Comunitat Valenciana recibió del Gobierno de España para financiar el sistema sanitario 125 veces más de lo que destinó el último gobierno del Partido Popular. Si nos atenemos a las cifras, puede comprobarse que esta comunidad ha recibido 1.176 millones de euros entre 2004 y 2008 frente a los poco más de 9 millones de euros que recibió con el gobierno de Aznar entre 2000 y 2004.
2.- La diferencia es abismal, pero a pesar de ella la sanidad valenciana no es 125 veces mejor, sino más bien al contrario. ¿Qué ha hecho el Gobierno valenciano del PP con los fondos sanitarios estatales? ¿Por qué después de este incremento no contamos con una sanidad pública de una calidad excelente?
3.- El PP justifica las crecientes carencias de la sanidad valenciana en la financiación autonómica, en que la población ha crecido en la Comunitat Valenciana. Pero lo cierto es que la población ha crecido exactamente un 7,6%, aproximadamente 350.000 personas, desde el 1 de enero de 2004, una cifra que proporcionalmente es bastante inferior al incremento de la inversión sanitaria que el Gobierno socialista ha transferido en esta legislatura a la Generalitat Valenciana para mantener una sanidad pública digna
4.- Con el PP se está produciendo una doble privatización de la sanidad pública: una privatización de la gestión -mediante el concierto de determinadas prestaciones con clínicas privadas y la entrega de la gestión hospitalaria a grandes empresas- y una huida de los usuarios del sistema público hacia la sanidad privada en busca de una atención rápida y de calidad. En lugar de aplicarse en una gestión sanitaria eficiente, el Gobierno valenciano favorece el desprestigio de los servicios públicos y de sus trabajadores y con ello la deserción por parte de los ciudadanos en la exigencia de una atención pública digna.
5.- El desprestigio de la sanidad pública sirve además al propio gestor político para justificar la privatización de la gestión. Interesadamente se confunde la gestión con el sistema, de modo que si la atención sanitaria es deficiente se atribuye la causa a las supuestas perversiones de lo público y no a la incapacidad o a la falta de voluntad del gestor, en este caso, la Generalitat Valenciana. Las competencias en materia sanitaria fueron transferidas a la comunidad autónoma valenciana en el año 1980. Nunca hasta ahora un gobierno autonómico había sembrado la confusión sobre esta materia de manera tan sistemática e interesada como lo ha hecho el PP valenciano. De su discurso parece desprenderse que la causa de las deficiencias de la sanidad valenciana se encuentra en el Gobierno socialista de España, que no tiene las competencias desde hace 28 años.
1. PEORES CONDICIONES LABORALES CON LA SANIDAD PRIVADA – La situación laboral de los profesionales que trabajan en las mutuas privadas concertadas con la sanidad pública son mucho peores que en la sanidad pública y en algunos casos rozan la indefensión (la ausencia de contratos por escrito, de reconocimiento de la especialidad o de actualización de honorarios han suscitado reiterados conflictos). En Cataluña los trabajadores de la Red Concertada trabajan más horas y sus empresas pueden aplicarles criterios de movilidad y de delegación de funciones. – La contratación del personal en los centros privados o acogidos al modelo de gestión privada se realiza en régimen de labolarización, lo que facilita su despido, sus contratos se adjudican a dedo, trabajan más horas y sufren mayor precariedad. – En las Fundaciones y otras empresas de gestión privada los profesionales y trabajadores no tienen reconocido el tiempo trabajado como mérito para acceder a otras plazas, no tienen derecho de traslado a centros públicos, ni siquiera a otras Fundaciones. – Disfrutan de menos derechos en días de vacaciones o en incapacidad temporal por enfermedad. 2. MENORES PLANTILLAS – Las Fundaciones Sanitarias tienen un 28,3% menos médicos por habitante, un 40,7% menos de enfermeras, un 68,4%en personal no sanitario y un 43,8% en el personal total que los centros públicos de características similares. – En los nuevos hospitales de Madrid, construidos porel modelo de Colaboración Público-Privada o concesion de obra pública (PFI) las plantillas de médicos y de enfermería son un 55% y un 71% inferiores respectivamente que las de hospitales públicos de similares características. En el caso del personal no sanitario las reducciones de plantillas han llegado al 50%, a lo que habría que añadir que la contratación, despidos, salarios y condiciones laborales del personal no sanitario han quedado en manos de la parte privada de los centros. 3. RIESGOS DE MALA PRAXIS Como consecuencia de la reducción de plantillas, las cargas de trabajo que soportan los profesionales sanitarios son mucho mayores que en la pública: En Cataluña, los trabajadores de la Red Concertada trabajan más horas y están sometidos a los criterios de movilidad y de delegación de funciones que las empresas les quieran aplicar. En las Fundaciones la escasez de personal obliga a los facultativos y al resto de categorías a realizar más guardias y horas de presencia física. Numerosas publicaciones demuestran que la reducción de plantillas del personal médico o de enfermería incrementan el riesgo de errores, de denuncias judiciales por mala práctica y de sufrir accidentes laborales (según una reciente publicación del Consejo Internacional de Enfermería, las reducciones de plantillas en enfermería se asocian a incrementos en la mortalidad de hasta un 31%y de riesgos laborales de lesiones por agujas).
Hola, voy a realizar un comentario sobre el tema de la privatización de la sanidad. Soy concejal socialista en la oposición de un pueblo de valencia y esto ya es demasiado. Añado unos comentarios para que los difundáis por donde podáis:
ResponderEliminarEn mi opinión, en nuestro sistema democrático, la sanidad pública es uno de los principales servicios y pilares del estado de bienestar y tenemos la mejor sanidad que pueda existir hasta el momento, en calidad y en cantidad. La cobertura es enorme. En este momento, estamos en la lista del séptimo país del mundo en cuanto a asistencia sanitaria y parece que el Sr. Camps y compañía tienen otros intereses en este momento.
Nunca creí que llegara a escribir sobre algo como esto, nunca pensé que se hiciera realidad o al menos, pensé que ocurriría en otro momento y circunstancias. La educación y la sanidad deben ser públicas para que todos tengamos los mismos derechos y oportunidades.
Las empresas privadas que operan en este sector, lo hacen, entre otras razones, por obtener beneficios económicos.De los casi 500 euros por persona y año , que por medio de los impuestos se paga a cada UTE las empresas gestionan la asistencia sanitaria teniendo como objetivo primordial los beneficios de los accionistas. Dicen que algunas de las decisiones asistenciales en una gran empresa comercial, están muy lejanas de los enfermos. Y por ello no se distingue con claridad la necesidad de servir al enfermo de la apetencia de rentabilidad.
económica.
Un claro ejemplo:
Cuando la Conselleria se niega a crear el servicio de oncología del hospital de Villajoyosa y concierta la asistencia oncológica con un Hospital Privado de Benidorm, ¿es consciente que perjudica la imagen del sistema público porque se limita la capacidad de resolver los problemas de sus ciudadanos?Claro que lo sabe, pero es una manera sutil de privatizar....o no tan sutil.
Si no se quiere favorecer y legitimar los operadores privados, ¿ por qué la Conselleria no ha creado el servicio en el hospital público de Villajoyosa, mientras que el nuevo hospital de Denia (gestionado por DKW) dispondrá de un servicio completo de oncología?
¿No sería más lógico que en lugar de destinar una parte importante del presupuesto sanitario público en beneficio de empresas privadas, este dinero se destinaran íntegramente a la asistencia sanitaria? Si la respuesta es afirmativa, es evidente que la sanidad pública valenciana debería estar gestionada directamente por la A.V.S.
Pero, según parece los argumentos no le valen al Gobierno Valenciano, que continúa desarrollando su Plan de Privatización (PP) de nuestro Modelo Sanitario Público, socavando sin prisas pero sin pausas los pilares de nuestro sistema de bienestar social.
¡Por una sanidad pública y equitativa para todos los ciudadanos!
Por último, añadir que todavía no hay documentación y que estaremos al tanto cuando la haya para informar a todos los ciudadanos del tema. Aquí termina el primer capítulo de la privatización del centro de salud. No le daremos las gracias al PP, ni mucho menos, al Sr. Camps.
Creo que es interesante esta información:
ResponderEliminar1.- En la pasada legislatura la Comunitat Valenciana recibió del Gobierno de España para financiar el sistema sanitario 125 veces más de lo que destinó el último gobierno del Partido Popular. Si nos atenemos a las cifras, puede comprobarse que esta comunidad ha recibido 1.176 millones de euros entre 2004 y 2008 frente a los poco más de 9 millones de euros que recibió con el gobierno de Aznar entre 2000 y 2004.
2.- La diferencia es abismal, pero a pesar de ella la sanidad valenciana no es 125 veces mejor, sino más bien al contrario. ¿Qué ha hecho el Gobierno valenciano del PP con los fondos sanitarios estatales? ¿Por qué después de este incremento no contamos con una sanidad pública de una calidad excelente?
3.- El PP justifica las crecientes carencias de la sanidad valenciana en la financiación autonómica, en que la población ha crecido en la Comunitat Valenciana. Pero lo cierto es que la población ha crecido exactamente un 7,6%, aproximadamente 350.000 personas, desde el 1 de enero de 2004, una cifra que proporcionalmente es bastante inferior al incremento de la inversión sanitaria que el Gobierno socialista ha transferido en esta legislatura a la Generalitat Valenciana para mantener una sanidad pública digna
4.- Con el PP se está produciendo una doble privatización de la sanidad pública: una privatización de la gestión -mediante el concierto de determinadas prestaciones con clínicas privadas y la entrega de la gestión hospitalaria a grandes empresas- y una huida de los usuarios del sistema público hacia la sanidad privada en busca de una atención rápida y de calidad. En lugar de aplicarse en una gestión sanitaria eficiente, el Gobierno valenciano favorece el desprestigio de los servicios públicos y de sus trabajadores y con ello la deserción por parte de los ciudadanos en la exigencia de una atención pública digna.
5.- El desprestigio de la sanidad pública sirve además al propio gestor político para justificar la privatización de la gestión. Interesadamente se confunde la gestión con el sistema, de modo que si la atención sanitaria es deficiente se atribuye la causa a las supuestas perversiones de lo público y no a la incapacidad o a la falta de voluntad del gestor, en este caso, la Generalitat Valenciana.
Las competencias en materia sanitaria fueron transferidas a la comunidad autónoma valenciana en el año 1980. Nunca hasta ahora un gobierno autonómico había sembrado la confusión sobre esta materia de manera tan sistemática e interesada como lo ha hecho el PP valenciano. De su discurso parece desprenderse que la causa de las deficiencias de la sanidad valenciana se encuentra en el Gobierno socialista de España, que no tiene las competencias desde hace 28 años.
1. PEORES CONDICIONES LABORALES CON LA SANIDAD PRIVADA
ResponderEliminar– La situación laboral de los profesionales que trabajan
en las mutuas privadas concertadas con la sanidad
pública son mucho peores que en la sanidad pública
y en algunos casos rozan la indefensión (la ausencia
de contratos por escrito, de reconocimiento
de la especialidad o de actualización de honorarios
han suscitado reiterados conflictos). En Cataluña los
trabajadores de la Red Concertada trabajan más horas
y sus empresas pueden aplicarles criterios de movilidad
y de delegación de funciones.
– La contratación del personal en los centros privados
o acogidos al modelo de gestión privada se realiza
en régimen de labolarización, lo que facilita su despido,
sus contratos se adjudican a dedo, trabajan más
horas y sufren mayor precariedad.
– En las Fundaciones y otras empresas de gestión privada
los profesionales y trabajadores no tienen reconocido
el tiempo trabajado como mérito para acceder
a otras plazas, no tienen derecho de traslado a
centros públicos, ni siquiera a otras Fundaciones.
– Disfrutan de menos derechos en días de vacaciones o
en incapacidad temporal por enfermedad.
2. MENORES PLANTILLAS
– Las Fundaciones Sanitarias tienen un 28,3% menos
médicos por habitante, un 40,7% menos de enfermeras,
un 68,4%en personal no sanitario y un 43,8%
en el personal total que los centros públicos de características
similares.
– En los nuevos hospitales de Madrid, construidos porel modelo de Colaboración Público-Privada o concesion
de obra pública (PFI) las plantillas de médicos
y de enfermería son un 55% y un 71% inferiores
respectivamente que las de hospitales públicos
de similares características. En el caso del
personal no sanitario las reducciones de plantillas
han llegado al 50%, a lo que habría que añadir
que la contratación, despidos, salarios y condiciones
laborales del personal no sanitario han
quedado en manos de la parte privada de los centros.
3. RIESGOS DE MALA PRAXIS
Como consecuencia de la reducción de plantillas,
las cargas de trabajo que soportan los profesionales
sanitarios son mucho mayores que en la pública:
En Cataluña, los trabajadores de la Red Concertada
trabajan más horas y están sometidos a los criterios
de movilidad y de delegación de funciones que
las empresas les quieran aplicar. En las Fundaciones
la escasez de personal obliga a los facultativos
y al resto de categorías a realizar más guardias y horas
de presencia física.
Numerosas publicaciones demuestran que la reducción
de plantillas del personal médico o de enfermería
incrementan el riesgo de errores, de denuncias
judiciales por mala práctica y de sufrir accidentes
laborales (según una reciente publicación del
Consejo Internacional de Enfermería, las reducciones
de plantillas en enfermería se asocian a incrementos
en la mortalidad de hasta un 31%y de riesgos
laborales de lesiones por agujas).